Masaje relajante en el que se trabaja una de las siguientes partes del cuerpo a elegir: espalda, piernas, pies, craneal o facial. En algunos masajes se incluyen las cervicales, ideal para destensar los músculos del cuello.
Beneficios:
Relajación muscular, libera tensiones, mejora la circulación y ayuda a desconectar.